Igual que las lluvias cuando arrecian, o cuando la intensidad de la luz reseca la tierra, así vuelven los recuerdos a aquella mujer. Unos de traslucidas imágenes, otros de intenso dolor.
Aunque el tiempo no es nada, su congoja la siente igual que el miedo, con la misma tensión y el mismo desasosiego.
Hay sucesos que el tiempo no serena, ni los recuerdos dejan de herir.
ResponderBorrarUn abrazo, amigo
El tiempo es el mejor autor: aunque no siempre encuentra un final perfecto.
ResponderBorrarUn abrazo grande desde esta orilla del inmenso mar.
Llega un momento en el que te das cuenta que ya no tienes necesidad de competir, ni de tener razón, ni aparentar ser...
ResponderBorrarIntentas respetar a los demás, observar y comprender.
Y al quitarte lastres empiezas a saborear verdaderamente la Vida.
Ningún ser humano es un fracaso si disfruta de la vida.
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