Un soldado fue alcanzado por una
flecha envenenada que, en lugar de extraérsela, se empeñó en saber quién la
disparó y desde qué arco fue lanzada.
Un soldado fue alcanzado por una
flecha envenenada que, en lugar de extraérsela, se empeñó en saber quién la
disparó y desde qué arco fue lanzada.
Samsa es el resultado de un proceso mediante el cual, la transformación padecida, se convierte en un suceso real que revela cómo a través de otro fingido que, en apariencia, nada tiene que ver con él, lo señala y lo denuncia. Samsa es una versión de un suceso que admite muchas versiones en espera de su turno, si bien no se encuentran en la naturaleza ni en las palabras de su propio padre.
Teresa acaba de
perder a su marido y vela el cadáver desde el anochecer. Sobre la rinconera hay
un libro que la mujer hojea. Lee los párrafos subrayados por el esposo que se
ha ido para siempre. Una oleada de recuerdos viene a su mente donde la vida
pugna para hacerse real otra vez, aunque llena de errores, torpezas y de
pequeños goces e incomprensiones. Casi se escucha el discurrir de la inflexible
mentalidad de la esposa. Otro hombre poco a poco va descubriéndose. Le duele que los hechos hayan pasado como hojea aquellas
páginas donde quedó consignada la amarga sensación de que nada, nada de lo sucedido,
podrá repetirse por la ineluctable culpa
de aquellas cosas de las que no puede señalarse a nadie.
Estimada Frau Milena:
Espero de ti dos cosas. La
continuación de tu silencio, lo cual significa: «No hay razón para preocuparse,
me va bastante bien.», O bien «No recuerdo tu rostro en detalle después de ver tan
horripilante figura en cama».
Afectuosamente Kafka.