sábado, 28 de septiembre de 2019

Albada provenzal

Google

Los amantes durante la noche padecieron su pasión
 hasta la llegada del alba que marcó el final y su separación. 
Volvieron a la mediocridad de sus días. 
Un aire macilento detrás de las ventanas 
lo invadió todo en suertes separadas: 
La forma de querer tú, es dejarte que te quiera yo.

10 comentarios:

  1. Bueno, tras la pasión d el anoche, la rutina invade las vidas. Igual la manera de amar de alguna gente, es dejarse querer, sin más.

    Un abrazo

    ResponderBorrar
  2. Equivale a decir que la aventura es peligrosa y la rutina letal.
    Un abrazo desde la otra orilla de las pasiones.

    ResponderBorrar
  3. ¿Qué sería de nosotros sin algún oasis en el desierto de la rutina?

    Sólo dejarse querer no es una forma de amar, creo. Acaba hiriendo.

    Un abrazo grande

    ResponderBorrar
  4. Ese último verso es tan real que duele.

    Saludos,

    J.

    ResponderBorrar
  5. Por supuesto, se trata de la suma de dos voluntades. Pero mientras tanto...
    Otro abrazo para ti, Alís.

    ResponderBorrar
  6. No lo pensé así; pero vale, por lo del alma vacía.
    Abrazo desde Colombia.

    ResponderBorrar
  7. Que triste es, solo dejarse querer......... Saludos desde México Guillermo.

    ResponderBorrar
  8. Más triste es no querer queriendo.
    Saludos y saluditos siempre.

    ResponderBorrar