María Antonieta empolvó con harina su peluca ante los acosados por el hambre.
Corte real
De regreso a la celda, a María Antonieta le quedaron unas horas para presumir de su corte de cabeza.
Siempre hay algo para presumir. Y si no, se lo inventa.Saludos,J.
Ese, al parecer, fue su mérito.Saludos.
Breve y efectivo, para un lecto que conozca un poco de historia.Saludos.
Siempre serán válidos los saberes previos del amable lector.Te dejo mi saludo.
Ese final es impactante.Un abrazo, amigo
Qué alegría me produce tu comentario.Mi abrazo incondicional para ti.
El abuso de la harina perjudica seriamente a la salud.Saludoss guillermo
Toda fermentación cae mal.Saludos don Gabi.
Fiel a su manera de ser.Saludos.
Hay que reconocerlo, su mérito fue demasiado grande por ello siempre presumió de él.Mi saludo desde Colombia.
La vanidad por encima de toda aentencia. Un abrazo.
La vanidad es un vicio que no se sacia con nada. Un abrazo para ti.
Siempre hay algo para presumir. Y si no, se lo inventa.
ResponderBorrarSaludos,
J.
Ese, al parecer, fue su mérito.
BorrarSaludos.
Breve y efectivo, para un lecto que conozca un poco de historia.
ResponderBorrarSaludos.
Siempre serán válidos los saberes previos del amable lector.
BorrarTe dejo mi saludo.
Ese final es impactante.
ResponderBorrarUn abrazo, amigo
Qué alegría me produce tu comentario.
BorrarMi abrazo incondicional para ti.
El abuso de la harina perjudica seriamente a la salud.
ResponderBorrarSaludoss guillermo
Toda fermentación cae mal.
BorrarSaludos don Gabi.
Fiel a su manera de ser.
ResponderBorrarSaludos.
Hay que reconocerlo, su mérito fue demasiado grande por ello siempre presumió de él.
BorrarMi saludo desde Colombia.
La vanidad por encima de toda aentencia.
ResponderBorrarUn abrazo.
La vanidad es un vicio que no se sacia con nada.
ResponderBorrarUn abrazo para ti.