Una de las cosas que trabajo con mis alumnos y coachees es identificar cuál es su personaje protagonista, ése que creamos para movernos por la vida (puede ser más de uno, según el dominio); el personaje oculto, que es aquél al que el protagonista protege y el objetivo es llegar al personaje integrado de ambos. Ninguno somos el mismo en todos los ámbitos. Lo terrible es cuando lo más esencial de nosotros queda escondido detrás de todos los demás personajes.
Bueno, es una reflexión sobre la fama que es más que oportuna en estos tiempos.
ResponderBorrarUn abrazo, Guillermo
Sobre todo si el ser humano del día suele ser historia de un día.
ResponderBorrarGracias y saludos.
Cierto, mi estimado amigo. Esos caradura de mil máscaras, ni vergüenza tienen.
ResponderBorrarSaludos.
Una de las cosas que trabajo con mis alumnos y coachees es identificar cuál es su personaje protagonista, ése que creamos para movernos por la vida (puede ser más de uno, según el dominio); el personaje oculto, que es aquél al que el protagonista protege y el objetivo es llegar al personaje integrado de ambos. Ninguno somos el mismo en todos los ámbitos. Lo terrible es cuando lo más esencial de nosotros queda escondido detrás de todos los demás personajes.
ResponderBorrarBreve, pero profundo
Un abrazo grande, Guillermo
Profundo y reflexivo texto amigo Guillermo, hay quienes tienen mas de dos caras. Saludos.
ResponderBorrarInteresante, da para pensar.
ResponderBorrarSAludos.
Hola!!! Muy lindo post. Te cuento que tenía un blog que se trancó y tuve que hacerme otro: poesias1973.blogspot.com
ResponderBorrarTe espero allí.
Besos al alma.
Vida privada, vida, privada, ¿qué era eso?
ResponderBorrarSaludos,
J.